A propósito de los informes sobre las protestas en Colombia en septiembre de 2020 y durante varias semanas de 2021, expertos forenses recomendaron la revisión de los protocolos bajo los cuales se usan las denominadas armas no letales, por parte de la fuerza pública, luego de comprobarse que si hubo personas que perdieron la vida.
Hay algo que para los expertos ha quedado claro con el uso de las denominadas armas no letales.
Estefan Schmidt del Centro Nacional de Ciencia y Tecnología Forense de la Florida, en los Estados Unidos, indicó que es muy complejo el control de los efectos de este tipo de elementos usados por la fuerza pública en la contención de manifestaciones y “pueden causar heridas serias, discapacidad permanente y por supuesto la muerte porque no son precisas al ser lanzadas o disparadas y pueden causar heridas no intencionales”.
Uniformados que usan armas no letales deben ser conscientes de sus efectos señalan expertos forenses
De acuerdo con el informe de la oficina en Colombia del Alto Comisionado de Naciones Unidas, para los Derechos Humanos durante las protestas del mes de septiembre de 2020, once personas murieron en hechos atribuidos a la fuerza pública.
Carlos Boshell, ex oficial de la Policía y hoy experto y consultor internacional en seguridad, advirtió que “se habla que es de letalidad baja, pero al final son armas letales y esto quiere decir que lo que se busca en su utilización es que el impacto sea más bajo y que no tenga una implicación que pueda colocar en riesgo la vida de una persona, pero en ese tipo de escenarios no se tiene 100% asegurado lo que va a pasar con estas armas”.
Para Schmidt, experto en la formación de organismos internacionales en denuncias forenses, la Policía en Colombia debe garantizar un adecuado entrenamiento para los uniformados que tienen la responsabilidad del uso de armas no letales.
“Realmente debería poderse determinar los procedimientos, el tipo de munición usada e incluso el récord de entrenamiento y la certificación de los oficiales para que puedan utilizar ese tipo de armas, en los Estados Unidos, por lo general, no se le da a un policía al azar un arma para que lo utilice como quiera, hay una certificación para cada arma en específico. Ojalá que en Colombia también sea así”, agregó.
A propósito del informe de Naciones Unidas, durante un panel de expertos, se concluyó que debe considerarse la utilización de herramientas tecnológicas durante la movilización social para documentar denuncias sobre el inadecuado uso de la fuerza, buscando evitar altos grados de impunidad, como se ha evidenciado en decenas de casos de víctimas.
Diana Arango, Directora del Equipo Interdisciplinario de Trabajo Forense y Asistencia Psicosocial (Equitas), asegura que “hay un factor común y es la importancia de preservar la evidencia de los abusos y el uso excesivo de la fuerza y para ello se da la triangulación de la información en video o fotográfica que exista, frente a la violación de los derechos humanos”.
La sensibilización sobre los efectos causados por el uso de armas no letales o por el exceso de fuerza también es un factor decisivo, a juicio de los expertos, para reducir las consecuencias y el número de víctimas durante la contención de las protestas.