A la capital antioqueña llegaron 89 indígenas más desplazados del municipio del Carmen de Atrato, en Chocó, por las amenazas de los grupos armados.
La Administración Municipal llevó a un albergue a las 20 familias pertenecientes a la comunidad indígena embera katío, que se suman a las 15 familias que ya habían llegado a Medellín el pasado 25 de mayo.
El personero de la ciudad, William Yeffer Vivas Lloreda, indicó que ya se activó la ruta para atender a estas personas. "Nos informaron que eran alrededor de 150 personas, que producto de la intimidación y amenazas de grupos ilegales, tuvieron que salir de su territorio. Finalmente, logramos recibir declaraciones relativas a 20 familias (69 personas), entre ellos la mayoría niños y mujeres", manifestó el personero.
La Personería de Medellín había advertido que a la ciudad podían llegar un total de 300 indígenas de esa misma comunidad, debido que el pasado 10 y 11 de mayo fueron intimidados por grupos al margen de la ley con disparos y marcaciones en las viviendas, por lo que entraron en un confinamiento.
"Tuvimos conocimiento de un desplazamiento forzado que se presentó desde la comunidad el 18, Carmen de Atrato, Chocó, hacia el municipio de Medellín. Se les activó ruta de atención y se encuentran en un albergue que dispuso para tal sentido la Alcaldía municipal de Medellín", agregó Vivas Lloreda.
Luego de un diálogo con los líderes de esta comunidad, esta agencia del Ministerio Público apuntó que estos manifestaron inicialmente que se encontraban en la ciudad de Medellín, porque necesitaban garantías de seguridad en su comunidad.
Cabe recordar que cinco pueblos indígenas de ese municipio chocoano refieren incumplimientos del Gobierno Nacional y departamental a compromisos en materia de inversión social pactados como resultado de las diferentes mingas que se han desarrollado en esta zona en los últimos meses.