Los videojuegos se convierten en un auténtico pasatiempo para muchos niños e incluso adolescentes. Aunque muchos padres se preocupen por el efecto negativo que esta clase de juegos puedan tener en sus hijos, estos pueden contribuir a que ellos tengan un mejor rendimiento cognitivo.
Así lo sugiere un estudio publicado por la revista de la Asociación Médica Estadounidense (JAMA, por sus siglas en inglés), quien indica que los niños “gamers” pueden alcanzar importantes beneficios cognitivos a raíz de esta actividad.
"Aunque la mayoría de las investigaciones han relacionado a los videojuegos con aumentos posteriores en el comportamiento agresivo en los niños, los hallazgos se han dividido con respecto a la asociación de los videojuegos con las habilidades cognitivas", señala el estudio.
Los investigadores contaron con la participación de 2.217 niños entre los ocho y nueve años, quienes fueron divididos en dos grupos diferentes; por un lado, estaban aquellos que nunca jugaban videojuegos y, por el otro, estaban los que se la pasaban tres o más horas al día al frente de una consola.
A ambos grupos se le asignó dos tareas. En la primera, los niños debían presionar tan rápido como pudieran la dirección de unas flechas que veían a la derecha y a la izquierda. Además, se les pidió que no presionaran nada cuando vieran una señal de “stop” (alto) para determinar qué tan bien podían controlar sus impulsos.
En la segunda prueba se les presentaban las caras de personas, luego se les preguntó si alguna imagen mostrada después coincidía o no. Esto para probar su memoria de trabajo.
Durante estas pruebas, se escaneó el cerebro de cada niño por medio de la resonancia magnética funcional (fMRI). Para el análisis estadístico, se tomaron en cuenta variables como los ingresos de los padres, el coeficiente intelectual y los síntomas de salud mental de cada menor.
Tras realizar la tabulación de los resultados, los investigadores determinaron que los niños “gamers” hicieron mejor ambas tareas, lo que evidencia que este grupo tiene una mayor respuesta en áreas cognitivas como la atención y la memoria.
"Estos hallazgos sugieren que los videojuegos pueden estar asociados con habilidades cognitivas mejoradas que involucran la inhibición de la respuesta y la memoria de trabajo y con alteraciones en las vías corticales subyacentes", concluye el estudio.