La Cancillería y la Vicepresidencia de la República aclararon que Colombia está dispuesta a recibir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) después del 29 de junio, fecha en la cual el Estado fue citado de oficio a una audiencia ante esa instancia.
Esto significa que por ahora dicho organismo internacional no hará presencia en el país, para verificar la difícil situación que se presenta por cuenta del paro nacional que ya completa 28 días.
El tema ha generado polémica en los sectores políticos. Los partidos de la coalición respaldan la posición del Gobierno, argumentando que las autoridades como la Fiscalía y la Procuraduría están avanzando en el esclarecimiento de los hechos de violencia y crímenes que se han presentado durante las protestas.
La senadora uribista Paola Holguín, defendió la labor desempeñada por la vicepresidenta. “Yo creo que este es un momento en donde no es bueno generar ruidos y entorpecer procesos que están en manos de los entes competentes encargados de investigar. Ya hay una hoja de ruta y yo creo que es muy importante la decisión del Gobierno y la apertura que ha tenido siempre para la vigilancia internacional y de los distintos organismos de control”, señaló.
Sin embargo, la oposición ha cuestionado la decisión el Gobierno colombiano, diciendo que no permitir en este momento la visita de la CIDH, es un error.
El senador liberal Guillermo García Realpe dijo que es “pésima la posición del Gobierno colombiano, representado por la nueva canciller, de no dar anuencia a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en nuestro país, nos pone en la misma situación de Nicaragua y de Venezuela que tanto descalifican. Colombia está a la par con Nicaragua y con Venezuela por no aceptar la visita de la CIDH”.
El senador Roy Barreras dijo que la Comisión de Paz seguirá insistiendo en la pronta visita no solo de la Comisión Interamericana, sino también de las Naciones Unidas (ONU), para que verifiquen lo que está sucediendo en el país.
“Lamentamos que el Gobierno haya rechazado la visita de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que pidió la Comisión de Paz. Los regímenes autistas no oyen lo que dicen en las calles y no ven las causas reales de la justa protesta social y cuando están en su fase degenerativa tampoco quieren que los vea la comunidad internacional. Insistiremos en esa visita de la CIDH y también de la visita de Michele Bachelet, la alta comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas”, dijo.
Aunque la oposición ha comparado esta negativa con la que en su momento hizo Nicolás Maduro en el caso de Venezuela, el Gobierno ha sido claro en que no tiene ningún problema en darle la bienvenida a la CIDH cuando sea necesario.