A través de redes sociales como Facebook se ha dado a conocer posibles casos de robo en Cúcuta, donde los delincuentes les dan escopolamina a sus víctimas para lograr cumplir su objetivo. Sin embargo, a lo anterior se suma que las víctimas no estarían realizando las denuncias formales a las autoridades.
El Coronel Freddy Barbosa, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Cúcuta, indicó a RCN Radio que “desafortunadamente las denuncias no se están haciendo a través de los canales que son los idóneos para hacer este tipo de denuncias, sino que simplemente queda en un video que es publicado en redes sociales".
“No nos hacen llegar los elementos probatorios para que la Policía Judicial, a través de una denuncia formal, pueda en coordinación con Fiscalía recolectar todos estos elementos que nos pueda servir para poder establecer la identidad de estas personas y ubicarlas”, agregó el Coronel.
Y es que en la ciudad fronteriza son varios los casos que se han escuchado, donde las víctimas estarían siendo drogadas con esta sustancia para robarles dinero de sus cuentas bancarias, prendas personales u objetos de valor que la víctima pueda tener en su vivienda e incluso hasta el cabello.
El Coronel Barbosa resaltó que hasta la fecha las autoridades “solo conocen los casos que se han publicado a través de las redes sociales y estamos trabajando con policía judicial y los cuadrantes para establecer de manera directa qué es lo que está pasando”.
Para el mes de abril del 2021 se conoció el caso de una mujer, quien fue abordada por un desconocido, le mostró un papel con una dirección en el que al parecer tenía la sustancia, dejándola bajo los efectos del psicoactivo y robándole su cabello.
El caso se dio en el centro de la ciudad, mientras la víctima se dirigía a entregar una hoja de vida. Para septiembre del mismo año se conoció el caso de otra mujer, que salía de un hotel, fue abordada por una pareja quien le suministro la sustancia, logrando que su víctima los llevara a su vivienda y fue ahí donde le hurtaron oro y otras prendas.
Por: Jenny Márquez