Hay escasez de pescado en el Corregimiento El Llanito, Barrancabermeja
En el corregimiento El Llanito, en Barrancabermeja, se presenta una situación que lleva a las comunidades a pensar en estrategias drásticas para mantener la seguridad alimentaria. Pues la disminución en la producción de pescado, es solo un síntoma visible de una crisis tras la sequía que afecta al Magdalena Medio.
Uno de los líderes del sector, explicó que la sequía extrema de la represa hidrogosamoso, ha transformado radicalmente el paisaje y el modo de vida en El Llanito. La ciénaga, alguna vez fuente sustento de vida, ahora yace seca, dejando a los pescadores con sus canoas varadas en playas de arena y lodo.
"La falta de agua no se limita solo a la imposibilidad de pescar. Los pozos artesanales, alguna vez vitales para nosotros, también se han secado, privándonos a los habitantes de El Llanito del acceso incluso al agua potable." Señaló el vocero.
José Villareal, líder de la Asociación de pescadores del corregimiento, expresó la angustia que sienten los pescadores al ver cómo desaparece su principal fuente de ingresos y cómo preocupa no obtener una solución rápida ante la crisis.
La situación ha llegado a tal extremo que algunos habitantes se ven obligados a desplazarse hasta el casco urbano en busca de agua, mientras que otros intentan cavar pozos más profundos con la esperanza de encontrar alguna reserva subterránea.
"El panorama es desolador, hacemos un llamado a las autoridades locales, departamentales y a nivel nacional. Los habitantes de El Llanito clamamos por ayuda, exigiendo acciones concretas para enfrentar esta emergencia humanitaria. Sin embargo, las respuestas que nos han brindado son escasas, y la sensación de abandono se profundiza." Dijo Villareal.
A pesar de los esfuerzos por mitigar la crisis, como el suministro de agua a través de carrotanques, la situación sigue siendo crítica. Los habitantes de El Llanito mencionaron seguir en la lucha por sobrevivir en medio de la sequía y la desesperación.
Mientras tanto, en Barrancabermeja, la advertencia sobre un posible racionamiento de energía y la necesidad de conservar el agua resuena con urgencia. La solidaridad y la responsabilidad colectiva se convierten en herramientas clave para afrontar los desafíos que impone la naturaleza.
La esperanza en el Magdalena Medio se aferra a unas próximas lluvias, que traerían consigo el aumento del nivel caudal tan anhelado. Sin embargo, el camino hacia la recuperación será los expertos, es largo y difícil, y la comunidad de El Llanito pidió apoyo y la solidaridad de todos.