¿Impulsar el turismo, pero dejar en el olvido las carreteras? Esta es la situación de Encino
Encino le apuesta a ser uno de los destinos turísticos más importantes del país con el avistamiento de aves, sin embargo el municipio le hace una importante solicitud a la Gobernación de Santander, y a la Unidad de Gestión del Riesgo, para que les gestionen maquinaria tras los daños que dejó la temporada invernal.
La situación afectó las vías rurales, donde vive el 76% de la población. Más de 800 familias no han tenido solución tras la declaratoria de emergencia durante un año, a causa de las lluvias.
Incluso el alcalde de Encino, José Gabriel Giratá, indicó que es importante agilizar el arreglo de la vía secundaria que conduce a Charalá, lo que no solo beneficiaría a Encino, sino también a Coromoro y Ocamonte. Pues los continuos derrumbes y deslizamientos han dificultado el único paso que tienen para trasladar a pacientes o personas que necesiten urgencias médicas, ya que son atendidos en el Hospital Regional de San Gil.
“Somos uno de los municipios que más se ha visto afectado por este paso crítico entre San Gil y Charalá. Hubo situaciones en las que se tuvo que sortear la vida de los pacientes al trasladarlos hasta Boyacá, porque afortunadamente tenemos una salida allá”, le comentó a este medio el mandatario.
Este municipio de la provincia Guanentá fue uno de los beneficiados de proyectos de impacto social, con programas de la Gobernación donde fueron incluidas personas tanto de la tercera edad como mujeres cabeza de familia. De manera que sí se comenzó a trabajar en la malla vial secundaria, pero falta inversión para impulsar nuevos productos turísticos apoyados por la misma Secretaría de Cultura y Turismo.
“Encino es el pueblito pajarero de Santander y queremos promocionarlo como el destino más importante de avistamiento de aves en Colombia”, añadió el alcalde. Sin embargo, la lluvia no dio tregua en esta región. Lo que dejó varias dificultades que afectaron la economía de la población. Motivo por lo que la comunidad considera que se debe tener en cuenta sus producciones, ya que en su mayoría los habitantes viven en las zonas rurales.
“Todo el año tuvimos la declaratoria de emergencia. Tuvimos dificultad con en el estado de las vías rurales porque la topografía es quebrada. Las vías tienen deslizamientos, puntos críticos, derrumbes, y ha sido difícil para casi 800 familias, el 75% de la población de Encino”, comentó Giratá.
Estas dificultes significan mayores costos para sacar cosechas o llevar insumos para las producciones agrícolas de esta zona. De manera que se considera que es más importancia atender estas necesidades con el apoyo de maquinaria, para el mejoramiento de las vías rurales.
"Tenemos un inventario de 150 kilómetros de vías afectadas, espero que de manera subsidiaria no solo nos ayude la Gobernación, también la Unidad de Gestión del Riesgo con el apoyo de maquinaria".
Expresó que muchas urgencias médicas de este municipio y poblaciones vecinas fueron atendidas en Duitama, Boyacá, por la cercanía y las dificultades para llegar hasta San Gil. Razón principal para agilizar el mejoramiento de estas vías, además de atender a las comunidades afectadas por la ola invernal.