Monitorean la biodiversidad en la zona adyacente al pozo La Lizama 158, en Santander
Hasta el próximo sábado 26 de junio se desarrollará la recolección de datos sobre el monitoreo de la biodiversidad en el área de influencia del pozo La Lizama 158 en donde hace tres años hubo un grave derrame de crudo.
Este es un trabajo que adelanta el Instituto Alexánder von Humboldt en alianza con Ecopetrol, el cual permitirá establecer, con la información científica recolectada, el estado y las tendencias de algunos componentes de la biodiversidad, luego de la implementación de un plan de recuperación después de la emergencia ocurrida en 2018.
Margarita María Roa, investigadora del instituto Von Humboldt, explicó que esta recolección de información culminará el próximo 26 de junio y a partir de ella se espera conocer el estado de todo el ecosistema adyacente al pozo La Lizama.
Expresó que se espera además que esa información contribuya al entendimiento del estado, además de las condiciones de vida y las características de los ecosistemas y especies presentes en el área donde se presentó la contingencia.
Asimismo, los datos recopilados entregarán información que permitirá desarrollar la investigación científica dará suficiente detalle de cómo la biodiversidad responde a procesos de recuperación y restauración.
Hasta el momento ya se ha adelantado la valoración de los grupos biológicos de peces, vegetación riparia (aérea), microorganismos, aves y paisajes sonoros en la zona de influencia.
Con este conocimiento dijo la investigadora se han entregado recomendaciones encaminadas a la recuperación ambiental, con su respectivo monitoreo.
Los investigadores trabajan de la mano de las comunidades en la zona, para dar la valoración respectiva sobre los cambios que se han presentado en los servicios ecosistémicos como medio de vida de la quebrada La Lizama y el caño La Muerte.