Por irrespeto y utilizar palabras desobligantes contra un veedor en Bucaramanga, la Procuraduría General de la Nación emitió una suspensión especial de cuatro meses en contra del candidato a la gobernación de Santander, Rodolfo Hernández.
Los hechos aludidos ocurrieron cuando Hernández se desempeñaba como alcalde en una actividad pública, en donde se le hizo un reclamo por la tala de árboles para la modernización del parque Solón Wilches.
Allí se atendía una queja de ciudadanos quienes aseguraban que las raíces de un árbol generaban grietas enormes en la calle anexa y por esa razón, quedaba en riesgo la integridad de las personas.
Por esta razón la Alcaldía adoptó la decisión de talar y podar controladamente las raíces; hecho que fue reclamado por un veedor, quien repitió varias veces “por favor no acabe con los árboles”.
Mientras tanto, el entonces alcalde, ordenó la tala de los árboles al tiempo que insultó al veedor a quien llamó lavaperros de la política y de los ladrones que robaron a Bucaramanga.
Fernando Martínez, el veedor insultado, señaló en su momento que cualquier situación que le ocurriera quedaba en responsabilidad directa de Hernández.
“Yo soy la autoridad ambiental, usted en lavaculos de la politiquería”, dijo airado en ese momento el entonces alcalde.
La Procuraduría insistió que todo funcionario debe tratar con respecto a la ciudadanía, pues es un requisito exigible a los servidores públicos.
Es un fallo de segunda instancia de la sala Disciplinaria de Juzgamiento de Servidores de elección popular, la cual afirmó que no hay duda sobre las palabras usadas por el entonces alcalde contra el veedor, al responderle por la poda de árboles.
Como Rodolfo Hernández no está desempeñando el cargo, la sanción impuesta se convierte en salarios mensuales devengados que equivalen a cerca de $62 millones.