Continúan los rechazos contra la reforma tributaria que se discute en Colombia en medio de la crisis económica provocada por la pandemia.
En esta oportunidad la crítica fue por parte del sacerdote de la Parroquía San José de Padua, Roberto Arenas Díaz, en el municipio de Pinchote, Santander.
El párroco en las tres últimas eucaristías en el momento del sermón ha criticado fuertemente la reforma tributaria, aseguró que si se frenará la corrupción no se tendría que poner este tipo de obligaciones para los ciudadanos.
“Hoy estamos viviendo una circunstancia en nuestro país, con una reforma donde fácilmente lo que quieren acabar no es con la clase media, es con todos, nos van a poner impuesto de todo y porque en lugar de recoger 30 billones que quieren, acabamos con la corrupción que al año produce 50 billones de pesos en hurto” dijo el sacerdote.
Reiteró que con solo frenar la corrupción en Colombia alcanzan los recursos para suplir las necesidades que ha generado la pandemia.
“Con solo parar la corrupción alcanza la plata y sobra, porque lastimosamente nuestros gobernantes son unos derrochadores de primera línea, ayer salió un estudio donde decía cuantos celulares tiene el Gobierno que debemos cubrir los ciudadanos con los impuestos, un millón de celulares” puntualizó Arenas.
Puntualizó que el Gobierno Nacional debería dejar de invertir en material para guerra y usar estos recursos para cubrir las necesidades que se han generado producto de la pandemia de la Covid-19.
Advirtió que los ciudadanos están cansados y se puede presentar problemas "Yo lo único que pido es que cuando este pueblo se sacuda que nos coja a todos confesados" señaló el sacerdote de la Parroquía San José de Padua.