Después de registrarse acciones violentas contra la base militar en El Tarra, en donde murió un civil y otras seis personas heridas, sigue la tensión en el municipio.
"Tenemos el comercio cerrado, diferentes actividades suspendidas, algunas vías bloqueadas por los manifestantes que pretenden reorganizarse para intentar acceder de nuevo al predio que pertenece al Ministerio de Defensa", dijo el alcalde del municipio de El Tarra, Jair Díaz.
Sigue siendo el ambiente muy tenso, a veces se reúnen 100 o 200 personas que buscan entrar a ocupar a la fuerza las 30 hectáreas de los terrenos de la base militar en El Tarra, en donde se registró la asonada contra los militares el pasado fin de semana.
Agregó el mandatario, que ante los últimos incidentes se decretaron medidas especiales por parte de la alcaldía con el objetivo de garantizar la seguridad a la población civil, al municipio llegaron integrantes de la OEA y de la Defensoría del Pueblo para analizar la situación que se registra allí.
"No ha sido fácil resolver esta problemática, se requiere de manera urgente la presencia de Migración Colombia para dar el manejo apropiado, no tengo la capacidad suficiente para ofrecerle los diversos servicios que reclaman los 6 mil venezolanos y son 22 mil ciudadanos los que tenemos en nuestro municipio", dijo el alcalde de El Tarra.
Así mismo, dijo el mandatario que ya colapsó el servicio de educación, salud y vivienda, es un riesgo para este tipo de población tanto venezolana como colombiana en la zona del Catatumbo, ante la presencia de diversos grupos armados y se debe evitar que estas personas sean utilizadas.
Mientras tanto en El Tarra las autoridades trasladan integrantes del Escuadrón Móvil Antidisturbios con el objetivo de apoyar al Ejército, ante la difícil situación que se registra por la intención de más de 400 familias de invadir un lote en el perímetro de seguridad de la base militar.