El pasado 24 de marzo, el ELN atacó con explosivos y fusil el puesto de Policía del municipio de Teorama, en Norte de Santander, en donde afortunadamente ningún uniformado resultó herido.
Pero, posteriormente el grupo armado dejó en pleno parque principal de Teorama, un explosivo que fue desactivado de manera controlada.
El coronel Carlos Martínez, comandante de la Policía de Norte de Santander, dijo a RCN Mundo "subversivos del cártel del ELN, la semana anterior atacaron al puesto de Policía, al responder nuestros uniformados y al verse perdidos los bandidos, se retiraron el sitio y después dejaron abandonados explosivos improvisados tipo balón bomba en pleno parque principal de la localidad".
Así mismo, dijo el oficial que la Policía Antiexplosivos destruyó el artefacto de manera controlada, que pudo haber ocasionado una tragedia, afectando a la población civil que se traslada por la zona, tanto a niños para ir a estudiar como a las comunidades campesinas en sus labores cotidianas.
En la última semana, los grupos armados han ubicado explosivos en el casco urbano de los municipio de Teorama, Hacarí, Tibú y Ocaña, con el objetivo de atentar contra la fuerza pública, afectando a la población civil de las distintas localidades.
Las autoridades han indicado, que se han logrado desactivar de manera controlada los distintos explosivos instalados por el ELN, disidencias de las Farc y 'Los Pelusos' del EPL en varios municipios de la zona del Catatumbo.
Igualmente, el pasado jueves 17 de marzo, a un costado de la vía que comunica el corregimiento Aguas Claras, en Ocaña, fue ubicado un cilindro bomba que contenía una alta concentración de explosivos.
El comandante de la Policía del Distrito de Ocaña, Carlos Sierra, dijo que "se trataba de un cilindro que fue desactivado por el Ejército de Antiexplosivos y se logró evitar afectaciones a la población civil y habilitar de manera normal el paso entre Aguas Claras y Ocaña".