Casa por cárcel a responsables de robar 23 granadas del batallón del Ejército en Bucaramanga
Por solicitud de la Fiscalía General de la Nación, un juez de control de garantías de Bucaramanga ordenó medida de aseguramiento domiciliaria para cuatro personas capturadas mientras transportaban explosivos en un bus de servicio público.
Los detenidos fueron identificados como Keiner David Robles Fuentes, Ángel Nicolás Fuente Sierra, Diego David Sánchez Uribe y Sebastián Arenales Calderón.
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Cabe destacar que Sánchez Uribe y Arenales Calderón prestaban servicio militar en Aguachica (Cesar) al momento de los hechos.
Los cuatro procesados fueron imputados por la Fiscalía como presuntos responsables de los delitos de tráfico, fabricación y porte de armas y municiones de uso restringido y privativo de las fuerzas armadas.
La captura se produjo el pasado 29 de enero, cuando fueron sorprendidos transportando 23 granadas pertenecientes al Ejército Nacional.
A través de un comunicado, la Segunda División del Ejército Nacional indicó que, gracias a labores de contrainteligencia, se logró identificar a dos soldados en servicio activo que presuntamente habrían sustraído material de entrenamiento.
Según la institución, dicho material era de uso exclusivo de la Policía Militar y no representaba un riesgo para la población civil ni para la infraestructura del Estado.
El Ejército aclaró que los uniformados se encontraban de permiso y que su captura se dio en circunstancias ajenas a su misión constitucional.
Además, confirmó que se inició una investigación disciplinaria para esclarecer los hechos y llevar a cabo los trámites administrativos correspondientes para su retiro inmediato de la Fuerza.
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Finalmente, la institución rechazó este tipo de conductas, señalando que no representan los principios ni valores militares, y reafirmó su compromiso con la seguridad de la población y la integridad de la Fuerza Pública.
El proceso de investigación se dio gracias al llamado de la comunidad. Según testigos, el comportamiento sospechoso de los pasajeros alertó tanto al conductor del bus como a otros ocupantes, quienes notificaron a las autoridades. Cuando la Policía llegó a verificar la situación, encontró que los implicados transportaban granadas en bolsos militares.
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Entre los explosivos había dispositivos de aturdimiento, humo e iluminación, lo que generó alarma entre los presentes. Las investigaciones continúan para determinar el destino final del material incautado y la posible participación de otras personas en este hecho.