El pasado 14 de noviembre se activó un plan de emergencia y de contingencia en el municipio de Cimitarra, tras conocerse un derrame de nafta en un poliducto ubicado en la vereda La Toroba.
Pese a que ya se conocieron las causas del derrame en el poliducto de Sebastopol – Santa Rosa, las autoridades de Cimitarra continúan a la espera de noticias por parte de Cenit, filial de Ecopetrol, sobre los resultados químicos de las cuentas afectadas.
Por esta razón, aún el ejército nacional y personal de Aguas de Cimitarra, siguen abasteciendo a la comunidad de agua mediante cinco carrotanques.
El gerente de Aguas de Cimitarra, Moisés Gómez, dijo que por WhatsApp había recibido un informe que anunciaba que la problemática ya estaba controlada, sin embargo, manifestó que no hay un reporte formal sobre la emergencia. Ante esto, no dejará de suministrar el preciado líquido hasta no obtener información oficial.
“No hay reporte de si hubo o no contaminación. Un funcionario me escribió que ya habían salido las primeras pruebas, pero que no había documento. Sigo esperando un informe oficial.” Señaló Moisés Gómez.
Cabe recordar que la situación se presentó por una alerta que emitió la instalación de válvulas ilegales que robaban hidrocarburo. Desde que se conoció la problemática, el Ejército Nacional hizo presencia para abastecer la comunidad y brindar seguridad a los trabajadores que ingresaran a Sebastopol a controlar el derrame. La emergencia hoy por hoy, afecta a más de 30 mil personas.
Mientras se da luz verde al uso del agua, la empresa filial de Ecopetrol hizo un llamado a la población; pidió que no se acercaran al sitio, evitar encender fuentes de calor en lugares aledaños, asimismo, no utilizar tecnología en el lugar y no utilizar hasta nuevo aviso, las fuentes hídricas.
Las personas han pedido presencia de autoridades locales, regionales y nacionales para resolver la situación pero por el momento, no han obtenido respuestas.
Por lluvias, el municipio presentó algunos altercados, como el desbordamiento del río Guayabito, en el sector de la cancha de fútbol, así como también el desbordamiento del río Carare entre las veredas El Valiente y El Vinagre, donde unidades de Gestión de Riesgo han hecho presencia para conocer los daños.