Desarticulan banda en San Gil, Santander que ganaba al mes $80 millones vendiendo droga
En un trabajo articulado entre la Policía y el Ejército Nacional se logró desarticular la banda delincuencial denominada “TIFOSI” dedicada al tráfico local de estupefacientes y porte ilegal de armas de fuego en el municipio de San Gil.
Según las autoridades para capturar a las 12 personas vinculada en esta banda se usaron a agentes encubiertos, se interceptaron líneas telefónicas, y se analizaron más de 150 horas de grabaciones de cámaras de seguridad, lo que permitió recaudar acervo probatorio e identificar el modus operandi de la organización.
#Judicial 🔴 Desarticulada la banda delincuencial común conocida como los "TIFOSI" dedicados al tráfico de estupefacientes y porte ilegal de armas de fuego en San Gil @PoliciaStander pic.twitter.com/tOpiilEDVM
— RCN Radio Bucaramanga (@RCNBga) December 4, 2024
Se hicieron tres diligencias de allanamiento y registro por parte del personal de la seccional de Investigación Criminal y Seccional de Inteligencia Policial, por eso se capturaron a estas 12 personas, diez fueron requeridos por orden judicial y dos en flagrancia.
El secretario del Interior de Santander Óscar Hernández señaló “este es un importante resultado de la estrategia unificada de la Policía y el Ejército Nacional, en donde se desarticula un grupo delincuencial común organizada en el municipio de San Gil denominado los “TIFOSI”, esta estructura se le hizo un proceso de investigación judicial, en donde por medio de tres órdenes de allanamiento, se logra la captura de 12 integrantes de esta estructura, la cual queda desarticulada”.
Añadió el funcionario departamental, “Esta banda delincuencial se dedicaba a traficar más de cinco mil dosis semanales de droga, casi alcanzando un promedio de manejo de finanzas ilícitas entre 60 y 80 millones de pesos por mes, esta investigación judicial acompañada por nuestra policía Nacional y Ejército Nacional, en donde se emiten las órdenes de allanamiento para poder capturar a estas personas vinculadas”.
Durante tres meses que tardó la investigación se pudo conocer las rutas estratégicas que utilizaban los delincuentes para poder comercializar los estupefacientes, además los lugares públicos que más frecuentaban en el municipio, información que fue recolectada y que sirve en el proceso de judicialización por parte de las autoridades.
Los capturados y los elementos materiales de prueba, fueron dejados a disposición de las autoridades judiciales competentes para que un juez de la República determine su situación jurídica.