Ganaderos en Cimitarra enfrentan una crisis láctea por falta de compradores
Cimitarra, el principal municipio productor de leche de Santander y uno de los que cuenta con mayores inventarios ganaderos, enfrenta una crisis económica severa debido a la disminución en la compra de leche por parte de las empresas recolectoras. Desde hace unos meses, los ganaderos locales han observado una caída significativa en los precios de compra y una reducción en la recolección del producto.
Las empresas compradoras de leche argumentan que tienen grandes inventarios de leche en polvo y que las ventas al consumidor han disminuido, lo cual ha llevado a situaciones extremas. Un ganadero decidió regalar 1,500 litros de leche en Cimitarra, mientras que las empresas acopiadoras han botado hasta 15,000 litros de leche, al no poder comercializarla.
Esta problemática ha golpeado duramente la economía local. Cimitarra solía producir hasta 50,000 litros de leche en sus mejores épocas, pero ahora enfrenta dificultades para comercializar su producción. La economía de la región depende en gran medida de la venta de leche: los campesinos compran sus alimentos, los medianos finqueros adquieren insumos, y los grandes emprendedores invierten en maquinaria con los ingresos generados.
El precio de la leche ha caído dramáticamente. Hace dos o tres meses, el precio estaba sobre los 2,000 pesos por litro, pero actualmente ha bajado a 1,200 pesos en algunos lugares, como la vereda Río Blanco. La mayoría de los 350 productores de leche en Cimitarra son pequeños, produciendo alrededor de 40 litros diarios, lo cual representa una economía familiar.
Incluso los emprendedores que entregan 15 litros diarios están viendo sus ingresos reducirse debido a la caída de precios y la falta de recolección. La economía de Cimitarra, basada en pagos quincenales, está sintiendo un fuerte apretón económico. Los ganaderos hacen un llamado al gobierno para que no se olvide del campesino que trabaja honradamente todos los días. Necesitan apoyo para que se compre su producción y para facilitar la venta de su leche.
Las empresas que históricamente han comprado leche en Cimitarra, como Colanta, Alquería y Parmalat hoy por hoy ya no miran al municipio. En tiempos de escasez, cuando no hay leche, las empresas preguntan por ella, pero en tiempos de sobreproducción, no hay grandes compradores. Esta situación ha llevado a la pérdida de más de 15,000 litros de leche.
Luis Manuel, un ganadero de Cimitarra, expresó su frustración: "En los supermercados no le bajan el precio a la leche, y aquí nosotros sufrimos por poder venderla. Necesitamos apoyo y soluciones para evitar que nuestra producción se pierda."
La comunidad ganadera de Cimitarra sigue en la espera de una respuesta gubernamental, por parte de la autoridad departamental, Juvenal Díaz; una solución que les permita superar esta crisis y asegurar la sostenibilidad de su principal actividad económica.