La mañana de este jueves se vivió una jornada álgida durante la diligencia de desalojo, que las autoridades llevaron a cabo en el sector conocido como Brisas de Fertilizantes del Puerto Petrolero.
Los terrenos que son propiedad de empresas privadas, habían sido invadidos por más de 600 familias de Barrancabermeja, desde hace más de cuatro meses.
La Policía Nacional y el Escuadrón Móvil Antidisturbios ordenó cerrar la vía a Fertilizantes para iniciar con el desalojo.
Aunque de manera pacífica, los invasores decidieron sacar sus enseres y dejar el predio, varias horas después los ocupantes denunciaron que no se les permitió seguir haciéndolo.
“Hay personas que invirtieron su dinero en la mejora, compraron tejas, madera y todo eso se perdió. No dejan entrar a ninguno para allá porque el que entra de una vez lo esposan y se lo llevan”, dijo una de las personas desalojas.
Al lugar llegó la personera de Barrancabermeja, Gina Romo, quien confirmó que se logró abrir un corredor humanitario para que ninguna de las familias perdiera sus enseres ni los materiales que ya había instalado en el sector.
Además, indicó que recibió dos quejas por el actuar de la fuerza pública, asegurando que va a compulsar copias tanto a Policía como a la Procuraduría.
Por su parte, la Corporación Regional para los Derechos Humanos, Credhos, denunció en sus redes sociales que uno de sus funcionarios fue agredido por unidades del Esmad.
“Abogado de Credhos es agredido por el Esmad al solicitar dialogar con miembros de la Personería, quienes se encuentran en el lugar del desalojo, Esmad impide la verificación del procedimiento”, dijo el organismo.
Finalmente, el subsecretario de Seguridad, Yimmi Picón Páez, informó que el operativo policial se debió al cumplimiento de un fallo en segunda instancia, del Juzgado Primero Civil del Circuito, ante una tutela instaurada por el propietario que no hubo uso excesivo de la fuerza en el proceso.