El proyecto de reforma política no ha podido ser votado en su cuarto debate en la Cámara de Representantes debido a que en las últimas horas se generó una polémica por cuenta de algunos artículos que los ponentes de la iniciativa intentaron revivir, pese a que se habían hundido en el debate anterior.
Los partidos políticos han expresado duros reparos a varias de las propuestas contenidas en la ponencia de la iniciativa, que según ellos, podría afectar el sistema de frenos y contrapesos en el Estado colombiano.
En las últimas horas, el liberalismo expresó algunas líneas rojas frente a la iniciativa. El representante y coordinador ponente de la reforma Octavio Cardona envió un documento a la bancada en el que cuestiona varios de los artículos contenidos en el proyecto.
En el documento, critica que los grupos afro e indígenas y miembros de la comunidad diversa, no estén sometidos a la alternancia ni a las listas cerradas para las elecciones a corporaciones públicas. Además, dice que el concepto de “listas únicas, cerradas y bloqueadas”, no está muy claro en el proyecto.
Adicionalmente, expresó que no es conveniente plantear la posibilidad de que los partidos que hayan llegado al Senado en coalición, tengan la posibilidad de solicitar la fusión.
Dice también que permitir que los congresistas sean ministros viola el derecho a la igualdad de los concejales, diputados y ediles que también deberían tener la misma posibilidad de llegar al poder Ejecutivo. Sin embargo, se advierte que esta medida podría ser utilizada para presionar nombramientos en el Gobierno.
“Se propone que los nuevos representantes a la Cámara estén habilitados desde los 18 años. Es decir, se aseguran con esto que no tengan ninguna experiencia laboral o política y de seguro no tenga más que el bachillerato o ni siquiera este”, señala en el documento que fue enviado a la bancada liberal.
“Los requisitos para ser ministro son los mismos que para ser representante a la Cámara. Así las cosas podría ser ministro una persona de 18 años, con primaria o incluso que no sepa leer ni escribir”, añade.
Sobre el transfuguismo, Cardona alerta que si esto se aprueba para que se implemente dos meses después de la entrada en vigencia de la reforma; los concejales, diputados y ediles elegidos en el 2023 tendrían carta abierta para abandonar los partidos que los avalaron, debilitando así las colectividades.
“Proponen que la Procuraduría no pueda destituir servidores de elección popular. Así las cosas, los alcaldes, gobernadores, diputados, concejales que cometan faltas disciplinarias gravísimas se quedarán cuatro años por no ser delitos”, señala además.
La próxima semana la plenaria de la Cámara de Representantes intentará votar nuevamente en cuarto debate la reforma política.