Procuraduría llama a juicio disciplinario a siete militares por atentado a la Brigada 30
La Procuraduría General de la Nación anunció este viernes que después de varias investigaciones, practicar pruebas y escuchar diferentes testimonios, decidió llamar a juicio disciplinario a siete de los once militares que estaban inmersos en estos hechos.
La investigación se inició, luego de que el pasado 15 de junio se produjera el ingreso y posterior explosión de una camioneta al interior de la Brigada 30 del Ejército en Cúcuta.
La decisión se toma cuatro meses después de los hechos, la procuradora general, Margarita Cabello, en su más reciente visita a Cúcuta había indicado que las investigaciones avanzaban por buen camino y que las mismas darían resultado en los próximos días.
Se logró conocer que como parte de la investigación, se realizaron varias inspecciones, por parte de la Dirección Nacional de Investigaciones Especiales, se escucharon los testimonios de testigos y se practicaron un sin número de pruebas.
La Procuraduría General, luego de analizar todo el material recopilado, decidió formular cargos y citar a juicio disciplinario a siete de los once militares que estaban involucrados en este proceso.
Se trata del coronel Ilvar Orlando Gonzales, quien al momento del atentado era el Comandante de la Brigada 30. También vinculó al coronel Pedro María Vega Losada, jefe del Estado Mayor y Segundo Comandante de la Brigada 30.
El teniente coronel Carlos Andrés Sarmiento, comandante del Batallón de Apoyo y Servicios de Cúcuta N°30 y encargado de la seguridad de las instalaciones militares.
Igualmente, fue llamado a este juicio disciplinario otro grupo de militares, entre los que se encuentran el mayor Cesar Alexander Carrero Salcedo, oficial de operaciones del Batallón de Apoyo y Servicios para el comandante N°30 en Cúcuta.
El sargento Viceprimero, Luis Eduardo Espejo López, quien era el comandante de guardia asignado para ese día 15 de junio, como da cuenta la bitácora que maneja el Ejército.
Al sargento segundo Mario Andrés López Roque, quien tenía asignada la administración para el día de los hechos, y finalmente al cabo segundo Óscar Leonel Pava, cabo de guardia asignado para el día del atentado.
La Procuraduría señaló que en el caso el comandante de la Brigada 30 que “debió gestionar, adelantar, facilitar, en fin, suministrar lo requerido por el BASPC (Batallón de Apoyo y Servicios de Cúcuta) para suplir la necesidad planteada y ampliamente documentada sobre los binomios caninos para el control de ingresos de vehículos y correspondiente inspección, a fin de detectar en ellos presencia de explosivos y de esa forma, garantizar el servicio de guardia y seguridad del gran establecimiento militar, en el cual no solo se ubica el batallón BASPC, sino todas las unidades incluso, agregadas al referido cantón”, se indica en el comunicado.
A los militares involucrados se les investiga si pudieron haber incurrido en omisión de sus funciones, pues al parecer el día del atentado la camioneta cargada de explosivos ingresó a las instalaciones militares sin los controles necesarios que hubiesen permitido frustrar el hecho delictivo.
Finalmente, en el caso del mayor Fredy Castillo, al capitán Carlos Mayorga y al mayor Humberto Parada Galvis, al igual que el soldado Iván Yáñez Carvajal, se decidió terminar la indagación que se llevaba en su contra.