La decisión de la Supersalud busca mejorar los procesos de la Intervención
Luego de varias visitas dentro de la Intervención forsoza y administrativa al hospital Emiro Quintero Cañizares de Ocaña, la Supersalud decidió remover a Yamil Roberto Blel Cervantes para mejorar algunos procesos administrativos.
Por tal razón, la entidad de vigilancia y control designó en las últimas horas a Víctor Augusto Pedraza López, como nuevo agente especial interventor para el hospital Emiro Quintero Cañizares, de Ocaña, en reemplazo de Yamil Roberto Blel Cervantes.
Según la Supersalud, con la decisión se busca la recuperación y procesos de mejora de la institución asistencial así como solventar los incumplimientos en el plan de acción y recuperación que arrojaron las visitas del Comité de Medidas Espaciales de la Supersalud, realizadas recientemente.
Durante el tiempo de Intervención en manos de Yamil Roberto Blel Cervantes se lograron subsanar en gran parte algunos hallazgos dejados en la administración del antiguo gerente Jairo Pinzón López. Pero, a pesar de los esfuerzos contra el tiempo el saliente Interventor no pudo cumplir con las metas encaminadas.
Dentro del proceso de mejora, Cervantes logró destacar la institución en el plan de vacunación contra el Covid-19, cumpliendo con un alto porcentaje en la aplicación de biológicos. Otro aspecto que mejoró la ESE Hospital Emiro Quintero Cañizares fue la de dotación de oxígeno en habitaciones para atención a pacientes y adecuaciones locativas.
El funcionario también niveló el factor salarial a empleados y pago a contratistas, uno de los esfuerzos también fueron encaminados a la recuperación de cartera a través de cobros a distintas EPS.
Sin embargo, las quejas de algunos usuarios se mantuvo frente a la contratación de profesionales especialistas, de igual manera los altos honorarios devengados por el Interventor y otros funcionarios, que en abril fueron expuestos por el dirigente político Fernando Augusto Álvarez.
Con todo lo realizado por el saliente Interventor y el nuevo agente se espera que el centro asistencial vuelva a la normalidad administrativa pues más de 200 mil habitantes de la región reciben atención en salud.
Cabe mencionar que la remoción, es una facultad discrecional de la entidad para el mejoramiento de los procesos administrativos. Por ahora, se realiza el empalme respectivo entre agentes para fijar la continuidad del plan de desarrollo del hospital regional.
Fuente
Alerta Santanderes
