Luis Osorio Chacin quien murió en la acción sicarial registrada a las afueras del colegio Santo Ángel en Cúcuta, el pasado 14 de septiembre, era ganadero del municipio Machiques del estado Zulia, exportador de queso en Venezuela, tenía varios negocios en la frontera que estaban relacionados con apuestas y otras actividades comerciales.
Según investigación de las autoridades, los tres sicarios que se movilizaban en un vehículo dispararon en 46 oportunidades contra el corolla color blanco, 29 de los disparos fueron con arma de largo alcance, tipo fusil, en donde se trasladaba Luis Osorio junto con otras cinco personas, entre ellos su hijo de 14 años, los dos escoltas y otras dos menores de edad.
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Según las autoridades, siempre se desplazaba en vehículos blindados y con un fuerte esquema de seguridad, quien tenía orden de captura por parte de las autoridades venezolanas por presuntos vínculos con el narcotráfico.
Juan Carlos Bocanegra, secretario de Planeación y alcalde encargado de Cúcuta, dijo a RCN Radio que "esta masacre es el resultado de enfrentamientos de bandas delincuenciales, de ajustes de cuentas, ante lo sucedido rechazamos toda acción violenta que termina afectando la vida de nuestros niños y adolescentes a las afueras de un establecimiento educativo".
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Así mismo, se conoció que existían varias investigaciones contra el escolta Ulises José Gelvez, jefe del esquema de protección de la víctima, varias anotaciones judiciales por porte ilegal de armas, y otros delitos.
Entre una de las hipótesis que manejan las autoridades se presume injerencia un cartel del narcotráfico de México y del cartel de los Soles que delinquen en la zona de frontera entre Colombia y Venezuela.