.
Las autoridades reportan sólo afectaciones en viviendas y daños materiales.
La comunidad de la vereda San Ignacio, ubicada en el kilómetro 22 de la vía a Cúcuta, se encuentra en una situación de emergencia luego de que el río de Oro se desbordara y arrasara con el puente que conecta la zona con la ciudad, dejándolos incomunicados y sin la posibilidad de transportar sus productos y alimentos hacia el área urbana.
Hasta el momento los habitantes manifiestan que continúan los arreglos para mejorar el paso hacia el municipio de Floridablanca. La comunidad recuerda que el año pasado, en la misma fecha, se enfrentaron a una situación similar y tuvieron que resolver el problema por cuenta propia al no obtener ayuda de ninguna autoridad.
Ante esta situación, el alcalde de Floridablanca, José Fernando Sánchez, confirmó la veracidad de la situación y aseguró que están trabajando para atender las afectaciones provocadas por el inicio de la temporada de lluvias. Se comprometió a enviar maquinaria amarilla y personal para restablecer el paso en la vereda San Ignacio en el transcurso del día, buscando así solucionar el problema que aqueja a la comunidad.
Por otro lado, en Charalá , tras las fuertes lluvias reportó afectaciones que generaron daños materiales en varias viviendas. Voluntarios de la Defensa Civil del comité Charalá se sumaron a los esfuerzos de ayuda , brindando apoyo a la comunidad afectada por la catástrofe que también causaron la caída de árboles en la vía de la Vereda Palma y daños materiales en una vivienda cuyo tejado resultó afectado.
Ante esta situación, la comunidad sigue a la espera de la pronta atención por parte de las autoridades municipales para poder superar esta emergencia y recuperar la normalidad en sus actividades diarias.
Fuente
Alerta Santanderes
