Santandereano que mató a policía chilena tendría que pagarle $300 millones a la familia de la víctima
Después de cuatro años que ocurrió el asesinato de la sargento chilena Ilse Amory Ojeda ocurrido en Santander, durante una audiencia el Juez Primero Penal del Circuito Especializado de Bucaramanga falló a favor de la familia de la víctima. Motivo por lo que Juan Guillermo Valderrama tendrá que indemnizar a los papás, la hermana, el hijo y el nieto de la policía extranjera.
Por daños materiales y morales en total debe pagarle $369.210.985 pesos a la familia de quien fue su compañera sentimental y terminó asesinándola dejando su cuerpo desmembrado y calcinado en zona rural de Rionegro.
Al momento por el feminicidio cumple una condena de 36 años, seis meses y 20 días de prisión en la cárcel de Palogordo, en Girón. Y ahora debe debería responder por el incidente de reparación. Incluso como reparación simbólica Valderrama también tendría que hacer un video para María Virginia del Carmen González Serpa, la mamá de la víctima.
El imputado fue acusado por el delito de feminicidio agravado y desaparición forzada agravada; así como por ocultamiento, alteración y destrucción de material probatorio.
Asimismo la defensa del condenado, Floralba Celi, manifestó que la decisión del Juez no fue apelada y con esta decisión se cierra el caso de la sargento asesinada.
“Hay sanción penal y civil que significa los perjuicios que se ocasionan con el delito. Se tomaron las pruebas las víctimas quienes fueron representadas por la Defensoría del Pueblo de Colombia. Hubo un monto de 100 millones para cada uno es decir para la madre, el padre, la hermana, el hijo y nieto de Ilse Amory Ojeda”, señaló la abogada del hoy condenado.
Igualmente se logró aprobar la suma de 5 millones 500 mil pesos a favor de Alejandra Margarita Ojeda, hermana de la víctima, por los gastos de pasajes de hotel cuando viajó a Colombia para el proceso.
El caso
La pareja se conoció en Chile y viajaron a Colombia en marzo de 2019 donde recorrieron varios municipios de Santander. A finales de ese mismo mes la familia de Ilse Amory Ojeda no volvió a recibir noticias de ella. En un inicio se presumía que habría sido secuestrada, pues Valderrama le dio una versión errónea a las autoridades sobre el paradero de la mujer.
Pocos días después el cuerpo de la sargento chilena apareció en Rionegro. Según investigaciones el homicida la golpeó con una porra en la cabeza, arrojó el cuerpo por un barranco y lo quemó. El condenado confesó que habría contratado alguien para que quemara el cadáver.