La comunidad del municipio de Hacarí, en Norte de Santander, a través de protestas, ha expresado su inconformismo por la falta de médicos que atiendan a los pacientes contagiados en medio de la pandemia por la COVID-19 y a pacientes con otras morbilidades.
Jorge Carrillo, habitante del municipio de Hacarí, señaló que "desde hace un mes no tenemos médico, hay dificultad en el Centro de Salud para atender a las mujeres embarazadas, niños y ancianos enfermos. A esto se suma los resultados que ocasionan las acciones violentas, que en la mayoría de los casos dejan personas heridas".
Ante las graves denuncias de la misma población, el Hospital Emiro Quintero Cañizares, a través de un comunicado, indicó que “se han realizado ocho convocatorias con el concurso del Instituto Departamental de la Salud y el Ministerio de Salud para brindar un servicio oportuno que requiere de manera urgente la misma comunidad”.
Pero los profesionales que se presentaron decidieron rechazar la oferta laboral, tras conocer de amenazas y agresiones denunciadas por sus colegas, quienes han prestado sus servicios en el municipio en los últimos años, en una zona en donde hay presencia del ELN, Los 'Pelusos' y disidencias de las Farc.
Así mismo, las directivas del centro hospitalario han indicado que vienen realizando brigadas de salud de manera preventiva de algunas enfermedades y que se viene cumpliendo con jornadas de vacunación.
Las autoridades han exigido respeto a la misión médica y los profesionales que desarrollan su labor en regiones como Norte de Santander y la zona del Catatumbo.
Entre tanto el Gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano, aseveró que "estamos realizando las gestiones pertinentes y creemos que en menos de tres días se estaría enviando personal médico para la zona en donde se necesita de manera urgente en medio de una pandemia".