A 15 días de la avalancha de El Tarrita en el municipio de Àbrego, representantes del sector comercial de Ocaña comienzan a analizar el impacto sobre la economía local; parte del mercado público permanece con pocos compradores y el despacho de vehículos desde la ciudad a Cúcuta, se realiza por Bucaramanga en un viaje que puede durar hasta 11 horas.
Roman Jácome, gerente de la empresa Cootransunidos habló con RCN Ocaña, e hizo un diagnóstico de lo que pudo apreciar en un recorrido sobre el tramo de El Tarrita, lugar donde miles de metros cúbicos de lodo destruyeron la vía y las viviendas de humildes campesinos.
“Hicimos el recorrido y sobre lo que se ha venido hablando en redes sociales, sobre la posibilidad de hacer un transbordo a través de un medio mecánico desde El Tarrita”, “y no, es un medio muy arcaico” acotó, sobre la imposibilidad de que sea un medio seguro para los pasajeros.
Jácome manifestó que, “por responsabilidad social no vamos a utilizar ese transbordo y vamos a continuar con el trayecto desde Ocaña - Cúcuta y Pamplona - Cúcuta” y así evitar cualquier riesgo para los pasajeros.
Una de las preocupaciones de los habitantes de Àbrego es que se está utilizando una “garrucha” o “tarabita” que es una especie de canasta con cable para atravesar de un lado a otro; pero que se convierte en un elemento improvisado con el peligro de caer al vacío.
Según expresó el representante de la empresa de transporte, el tramo vial no cuenta con seguridad y se evidenció en el hurto de víveres y un vehículo, a la altura de Pavez en Àbrego.- lo que lo llevó a auxiliar y transportar a las víctimas del hecho. La parte más afectada es donde estaba ubicado el Puente de El Tarrita, donde una gran masa de lodo permanece.
También indicó que se pudo conocer que “sólo se avanzó 5 metros en 8 horas de máquina”, lo que indicaría que no existen suficientes recursos para avanzar rápidamente hacia la apertura óptima de la vía.
“No vemos que tengamos a corto tiempo” disponibilidad de la vía, dijo el gerente de Cootransunidos y con preocupación indicó que, ‘Estamos muy por debajo, un 30% de venta de tiquetes”, pero agradeció el apoyo de los usuarios.
Una situación especial que genera preocupación es la falta de pronunciamiento del Ministerio de Transporte y de igual manera el poco interés del gobierno nacional en la atención de la zona con una declaración de “Calamidad Pública”, que podría agilizar la optimización de recursos para los damnificados.