
Piden al Ejército cesar bombardeos por afectaciones a civiles en el Catatumbo
Sigue la preocupación en la provincia de Ocaña por los constantes combates y bombardeos por parte del Ejército Nacional contra integrantes del ELN que hacen presencia en la zona y que está generando alerta entre las comunidades y defensores de derechos humanos.
Al punto, que según la secretaría de gobierno y la personería de Ocaña, 303 personas han salido desplazadas de las veredas El Pino, Mariquita, La Pacha, San Francisco y Santa Clara, por los intensos enfrentamientos que se presentan desde el pasado lunes en la zona.
Ante esta situación, la red departamental de defensores de derechos humanos han solicitado a los actores armados, legales e ilegales, que cesen estas acciones para que las comunidades civiles no se vean afectadas por esta ofensiva que lidera la fuerza pública contra grupos armados al margen de la ley.
Nelson Arévalo ex-defensor del pueblo en Ocaña y representante de la red departamental de Defensores de derechos humanos en RCN Radio aseguró que se debe tener respeto al principio de distinción y proteger a la población civil que está en medio de los bombardeos.
“La Corporación Red Departamental de Defensores de Derechos Humanos, hace un llamado urgente a que, en medio de los combates que se presentan actualmente en la vereda Los Pinos, corregimiento de Mariquita, zona rural de Ocaña, se respete el principio de distinción, uno de los pilares del Derecho Internacional Humanitario; este principio establece que no se puede atacar ni poner en riesgo la vida ni la integridad de la población civil, de los campesinos, de los líderes sociales, ni de quienes trabajan por la paz y la defensa de los derechos humanos en los territorios"; expresó el ex-defensor del pueblo de Ocaña.
De igual forma, la red de defensores han solicitado cesar la operación para que las personas que están en medio de la confrontación no se vean afectadas y puedan resguardarse, petición de la iglesia católica en la zona.
"Nos unimos al clamor del padre Ramón Andrés Torrado, encargado de la Pastoral Social Campesina de la Diócesis de Ocaña, cuya voz representa el sentimiento de las comunidades que solo piden vivir con dignidad y en paz; Su llamado al cese de bombardeos expresa la urgencia de garantizar condiciones mínimas de protección para las comunidades, que hoy no pueden ni siquiera refugiarse hacia zonas seguras".
Han manifestado desde la región, que el Estado debe garantizar la protección de los derechos humanos en todo momento, las medidas de excepción, como la conmoción interior, no justifican abusos contra la población civil, y exigen que las operaciones de la fuerza pública se lleven a cabo respetando los derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario, especialmente los principios de distinción, precaución y proporcionalidad, garantizando siempre la vida y la dignidad de la población.
Las autoridades en la zona hacen un llamado urgente a los grupos armados al margen de la ley, que han generado preocupación entre las comunidades, desescalar la violencia que sigue ocasionando el aumento de poblaciones desplazadas, confinadas y homicidios en el Catatumbo.
"Les exigimos que cesen en su actuar criminal y las prácticas violentas que se ejecutan de manera indiscriminada, violando de forma grave los derechos humanos y los principios fundamentales del Derecho Internacional Humanitario, deben cesar de inmediato".
En la región, sigue la atención a esta población en medio de la violencia que cumple tres meses de iniciarse la confrontación armada entre el ELN y las disidencias de las FARC en el Catatumbo.